Cambia flujo migratorio de solicitantes de asilo con Título 8
*Esta nota fue realizada por La Verdad, parte de la alianza de medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes leer la original.
A un mes de la terminación de Título 42, los extranjeros regresados desde Estados Unidos son sacados de Ciudad Juárez mientras repuntan los que se trasladan del sur que buscan cruzar con cita por CBP One
POR VERÓNICA MARTÍNEZ / LA VERDAD
Ciudad Juárez– Carlos Hugas espera en la fila para ingresar al comedor que está ubicado en la catedral Nuestra Señora de Guadalupe, donde se alimenta a personas migrantes que transitan por la ciudad. El hombre originario de Venezuela llegó hace más de una semana desde Colombia, un trayecto que le tomó más de 24 días.
El venezolano de 40 años pretende cruzar a Estados Unidos por esta frontera. Narra que llegó en tren junto con un grupo de cinco personas.
“Estuve en Tapachula, de ahí nos fuimos a un pueblito y de ahí agarramos el primer tren. Llegamos a la casa del migrante y de ahí agarramos otro y entramos directamente a Juárez”, dijo Hugas, quien desde que llegó intenta sin éxito apartar una cita para su solicitud de asilo a través de la aplicación CBP One.
Como él cientos de extranjeros continúan llegando desde el sur del país después de la revocación de Título 42 y del regreso a la aplicación de Título 8. Aunque durante la primera semana de ese cambio bajó el arribo de migrantes en busca de asilo en Estados Unidos, luego de esos días repuntó otra vez, coinciden diferentes actores – gubernamentales, de sociedad civil e investigadores– involucrados en atención y seguimiento del fenómeno migratorio.
Sin embargo, las personas migrantes que actualmente están en Ciudad Juárez se encuentran en un proceso de tránsito, como explicó Rodolfo Rubio, investigador del Colegio de Chihuahua e integrante del Grupo Interdisciplinario en Temas Migratorios.
Su estadía en la ciudad será en función a las fechas y los tiempos que se les vayan dando a través de la aplicación, añadió.
Además de esta nueva condición, los retornados por el gobierno estadounidense, son sacados inmediatamente al ser recibidos de este lado de la frontera, indican versiones de organizaciones y personas en movilidad.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) reportó que del pasado 12 de mayo al 2 de junio se han repatriado a más de 38 mil 400 personas bajo la autoridad migratoria del Título 8. Esta cifra incluye a mil 400 no ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que fueron retornados a México bajo la nueva política migratoria.
Organizaciones y redes de la sociedad civil aseguran que los primeros días de Título 8, las personas extranjeras repatriadas fueron recibidas en el país por agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y transportadas a Villahermosa, Tabasco y Tapachula, Chiapas, en un intento por alejarlas de la frontera norte. Algunos migrantes aseguran que también han sido trasladados en autobuses de Ciudad Juárez a Zacatecas, donde son dejados en la vía pública.
Además, denuncian las organizaciones que poco se sabe del Plan Humanitario Conjunto sobre Migración, firmado por México con Estados Unidos al retomarse Título 8, por lo que piden al gobierno mexicano dar a conocer la política acordada para su recepción de personas originarias de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela deportadas desde Estados Unidos.
El Consejo Estatal de Población, dependencia del Gobierno de Chihuahua que atiende a la población migrante, no ha registrado de manera oficial a personas extranjeras siendo retornados bajo el esquema del Título 8, dijo su coordinador, Enrique Valenzuela.
“Nosotros estamos atentos para el caso de que exista la necesidad de brindar algún tipo de atención a esta población, pero no hemos tomado razón de que en esta frontera estén llegando algunas personas para permanecer o que sean retornadas de forma voluntaria siendo extranjeros a México”, afirmó Valenzuela.
Tanto en el caso de connacionales que son retornados bajo esta autoridad, así como personas extranjeras, corresponde al gobierno federal, a través del Instituto Nacional de Migración (INM), recibir y dar atención durante su llegada a México, aseguró.
A su vez, el delegado del gobierno federal en Chihuahua, Juan Carlos Loera de La Rosa, respondió que la información sobre los procesos migratorios corresponden a la Secretaría de Gobernación, Secretaría de Relaciones Exteriores y el INM.
Al ser consultados sobre las deportaciones, el INM no dio informes de cuántas personas han sido recibidas en Ciudad Juárez al ser expulsadas por autoridades de CBP. El equipo de La Verdad también solicitó detalles sobre estos procesos de traslado, los destinos a dónde llegan las personas deportadas y bajo qué estatus migratorio quedan en el país.
También se solicitó a la Secretaría de Relaciones Exteriores cifras sobre el número de migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela recibidos por el gobierno de México desde el 12 de mayo bajo los acuerdos coordinados con Estados Unidos, sin embargo esta dependencia federal informó que no era el sujeto obligado para atender la petición de información y sugirió dirigir las preguntas al INM.
LLEGAN DEL SUR, REPUNTAN OCUPACIÓN DE ALBERGUES
En tanto la opacidad se mantiene sobre la situación de los extranjeros deportados por México, el repunte en el flujo de los migrantes que llegan del sur se refleja en la ocupación de los albergues.
Miguel González, coordinador de la red de albergues Somos Uno por Juárez, menciona que de finales de mayo a inicios de junio la ocupación en estas estancias pasó de un 60 por ciento al 90 por ciento.
“Al principio nos pareció extraño el comportamiento del flujo migratorio pues no vinieron las masas que esperábamos”, dijo González al hablar sobre el impacto de la terminación de Título 42. “Ha ido despegando lentamente y ahora ya vemos más un poco de movimiento”.
Aquellos que no se encuentran dentro de este sistema de albergues gubernamentales y de sociedad civil rentan cuartos de hotel o inmuebles en la zona centro. Otra gran parte de la población en movilidad se encuentra viviendo en situación de calle, unos están en el Parque El Chamizal y en un campamento con servicios proporcionados por el gobierno municipal y el Instituto Nacional de Migración cerca del puente internacional Reforma.
La mayoría confía estar pocos días en la ciudad. Carlos Hugas, quien mencionó que su plan es seguir intentando por diez días más agendar una fecha para entrar por el puente internacional Paso del Norte. Si no lo consigue empezará a ver otros puertos de entrada como opción.
“Juárez era una de las ciudades que menos pensábamos venir”, dijo mientras espera su turno en la comedor de la Catedral. “La gente vociferaba mucho acerca de los carteles o lo que pasó del incendio. Por eso quedamos muy focalizados en todas las fronteras menos en está, pero resulta que las personas que nos van a recibir están más cerca de aquí”.
David y Máximo, ambos de Venezuela, también esperan en la antesala del comedor de la Catedral. Solicitaron apoyo al personal de la Oficina de Movilidad Humana y la Organización Internacional para las Migraciones para ser canalizados a un albergue.
Ambos migrantes, que se conocieron en su trayecto por México, lograron agendar una cita a través de la aplicación para presentarse en el puerto de entrada Paso del Norte. Llegaron a Ciudad Juárez en avión y sólo buscaron una estancia en un albergue por cinco días.
“Nosotros hicimos lo de la cita del CBP One en Tapachula y nos fuimos a la Ciudad de México. Yo obtuve mi cita estando en la Ciudad de México y el (Maximo) cuando estuvimos en Matamoros”, explicó David.
David menciona que fue un proceso que le tomó quince días para lograr conseguir esta cita, pero una vez que lo lograron pudieron viajar de forma aérea sin dificultades.
“Uno para poder viajar necesita un permiso migratorio o la cita del CBP One. Nosotros como teníamos la cita nos pararon y nos pidieron documentos y pasaporte. Primero pensaron que no teníamos algo que nos respaldara, pero sacamos el papel del CBP One. De ahí todo excelente”.
Dirvin García, jefe del Programa de Atención a Migrantes en COESPO, dijo que la gran mayoría de los migrantes arriban por tren a la ciudad y se ha identificado su mayor demanda es información sobre el uso de la aplicación CBP One.
“Las personas cada vez son más conscientes sobre la importancia del uso de la aplicación porque no quieren cruzar y generar algún récord migratorio”, señaló García.
Con la terminación del Título 42 se han registrado variaciones en la dinámica migratoria en esta frontera, explica Enrique Valenzuela coordinador del Consejo Estatal de Población. Previo al 12 de mayo, fecha en la que expiró la autoridad de salud pública, se vio una salida masiva de personas que buscaban ser aceptadas en los Estados Unidos.
Ahora cada mañana se ve una fila en el puente internacional Paso del Norte de personas que ya cuentan con una cita para presentarse ante autoridades migratorias de EE.UU.
“Vemos que el mensaje de la conveniencia de ingresar a través de la aplicación CBP One cumplió su cometido. Las personas que se acercan al puente lo hacen a la hora y el día de su cita”, dijo Valenzuela.
Aún así hay una parte de la población que ve las posibilidades de pasar sin el uso de la aplicación y suelen esperar en el puente internacional para ver si hay capacidad para que agentes de la CBP llegue a procesarlos.
Henry, de Colombia, y Yaii de Venezuela también llegaron en tren. Bajaron en la estación en el sur de la ciudad y llegaron a la Catedral en transporte público. Fueron las personas del sector sur de la ciudad quienes les informaron que en la Catedral podrían comer y recibir atención.
La mochila de Henry viene casi llena y por una apertura del zipper sobresalen las varillas para armar una casa de acampar. El joven menciona que desde hace un mes y medio que él y su compañera no duermen en una cama.
El joven colombiano menciona que la situación en su país era difícil pues todo lo que él ganaba apenas le alcanzaba para comer y anticipa que más colombianos vengan en el futuro.
“La situación está complicada pero apenas está comenzando”, dijo Henry. “Tengo amigos de allá que me preguntan cómo es el camino y cómo hacerle”.
Yaii mencionó que sin una red de apoyo en los Estados Unidos y sin un patrocinador ven limitadas las oportunidades para poder entrar a través de la aplicación CBP One.
Sin comentarios aún.