Semarnat confirma: granjas de puercos intoxican cenotes en Yucatán
*Esta nota fue realizada por Pie de Página, parte de la alianza de medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes leer la original.
La contaminación emitida por granjas porcícolas en Yucatán rebasa los límites saludables y de sostenibilidad permitidas, por lo que es necesario tomar acciones para limitarla; anunció la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Texto: Arturo Contreras Camero
CIUDAD DE MÉXICO.- En 13 municipios de Yucatán hay niveles inaceptables de contaminación en el agua, provocados por las granjas porcícolas del estado, confirmó esta tarde la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. De estos, cuatro municipios presentaron niveles críticos, mientras que otros 11 fueron catalogados como de atención prioritaria. La Semarnat demostró que en los 13 municipios se había rebasado el límite permitido de concentración de fósforo y nitrógeno en el agua de todo el estado.
Hace siete años, diferentes comunidades del estado iniciaron una batalla contra de estas granjas por las afectaciones al agua y al ambiente. Su lucha les ganó un amparo ante la Suprema Corte de Justicia y varias suspensiones a granjas de este tipo. Desde entonces, las protestas han ido en aumento. También la represión del gobierno local. La semana pasada, en una protesta en el centro de Mérida exigiendo el cese a la criminalización de los pueblos mayas que se oponen a las granjas de puercos, cuatro personas fueron detenidas por policías del estado vestidos de civil.
Esta mañana, desde la conferencia matutina del presidente López Obrador, la secretaria del Medio Ambiente, María Luisa Albores, adelantó que la dependencia a su cargo había realizado un estudio integral de la calidad de tierra, agua y aire alrededor de estas granjas, y que se estaba replanteando la capacidad del medio ambiente de sostener una producción porcícola tan alta.
No más permisos para granjas de cerdos
En los municipios de Muna, Conkal, Cacalchén, y Muxupip, considerados como críticos, se deberá reducir la densidad de cerdos por hectárea y no se podrán otorgar más permisos o instalar granjas nuevas. Así también en Mérida y Kanasín, que a pesar de ser municipios de atención prioritaria y no críticos, no se podrán abrir granjas nuevas por su alta densidad poblacional. En Muxupip, Opichén, Hocabá, Acanchen, Tekantó, Xocchel y Tixpehual, se deberán mejorar los sistemas de tratamiento de agua de las granjas de cerdos.
Los controles poblacionales de las granjas de puercos se limitarán a un cerdo por hectárea en todo el estado. Este límite pondrá las reglas en México en el mismo nivel que Brasil y Tailandia, e incluso en niveles más estrictos que Estados Unidos y Reino Unido, donde se permite entre 1 y 2 cerdos por hectárea.
El estudio realizado por la Secretaría del Medio Ambiente, y Recursos Naturales (Semarnat), junto con el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) y el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), evaluó las descargas de agua residual en 10 granjas del estado seleccionadas entre las dependencias que realizaron el estudio y el gobierno de Yucatán. Todas operaban con un biodigestor, lagunas de estabilización y desinfección de sus aguas residuales por cloro u ozono y sistemas de saneamiento, sin embargo, sus capacidades no alcanzaron los requerimientos marcados por Norma Oficial Mexicana 001.
En la tarde, en un mensaje transmitido por la página de Facebook de Semarnat, Adrian Pedroza Acuña, del IMTA, explicó que el estudio se centró en evaluar el nivel en el que la producción porcícola es sostenible. Para ello se determinó la concentración natural de nitrógeno en cenotes prístinos, vírgenes, y se duplicó. Bajo ese esquema, más de 30 municipios rebasaban los límites de sostenibilidad; ante ello se tomó una medida más laxa y el límite máximo pasó del doble a diez veces la concentración natural.
Lo que buscamos es hacer del agua un motor de desarrollo económico y saber hasta dónde podemos soportar este tipo de producción; qué tanto es tantito”, dijo Pedroza Acuña.
Agua tóxica y daños al suelo: consecuencia de granjas de cerdos
Este estudio no solo permitió determinar un nivel tolerable de contaminación en el agua, sino que arrojó información sobre la dimensión de las granjas porcícolas en el estado, que hasta hace poco, era poco clara. Según la Semarnat, en Yucatán hay 507 granjas porcícolas. 139 de ellas de traspatio o autoconsumomo, 208 con una o dos naves de producción, 89 con tres a siete naves, 48 con ocho u veinte y 23 con más de 20 naves de producción, consideradas megagranjas de puercos.
Entre las afectaciones por concentraciones altas de nitrógeno y fósforo está la eutrofización de los cuerpos de agua superficial, es decir, que el agua se vuelva tóxica, porque se consume su oxígeno, lo que produce la creación de algas, además de la filtración de lixiviados patógenos al subsuelo, capaces de dañar la fertilidad de suelo. Un puerco produce entre cuatro o diez veces la cantidad de heces que un humano adulto. Se estima que los 20.28 millones de puercos que hay en México producen tanto estiércol como el 60 por ciento de los mexicanos.
María Luisa Albores dijo que el estudio respondió a una carta enviada en marzo de 2022 a la Presidencia desde los pueblos de Yucatán afectados, que pedían ayuda ante la contaminación desmedida producida por las granjas de cerdos.
“Desde el año pasado se habían instaurado unas mesas de diálogo con varias de las comunidades que se estaban quejando por la industria. Estas mesas se dejaron de hacer hacia noviembre, y no fue hasta hace un mes que los de la Semarnat convocaron a una reunión y anunciaron los resultados parciales de esa investigación”, cuenta al respecto Miguel Anguas, miembro del colectivo de defensa de Derechos Humanos Kanán, que ha acompañado a las comunidades afectadas.
En ese sentido me parece que es un trabajo correcto. Cuando se haga público, hay que ver la postura oficial final de la Secretaría del Medio Ambiente, porque sentimos que van a poner un punto medio entre nuestras demandas y las de la industria para calmar las aguas”, agrega en entrevista.
Para garantizar los límites, la Semarnat iniciará con un proceso de inspección, monitoreo, censo y análisis periódico en las granjas porcícolas del estado.
Sin comentarios aún.