Clausuran mina clandestina en Oaxaca que operaba a favor de la Cruz Azul

Clausuran mina clandestina en Oaxaca que operaba a favor de la Cruz Azul.
Fotos cortesía de PROPAEO

**Esta nota fue realizada por Istmo Press, parte de la alianza de medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes leer la original.

#UniónHidalgo (#Istmopress) – Como un triunfo y tras una lucha de dos años, celebraron defensores binnizá -zapotecas- y organizaciones sociales como Codigo DH, la clausura definitiva de la mina clandestina ubicada en el Cerro La Llovizna-sitio sagrado- que operaba a favor de la cementera La Cruz Azul.

Código DH declaró que en mayo del 2022, realizaron una visita al sitio y constataron el uso de explosivos sin autorización y además las autoridades desconocían todo lo que operaba en el Cerro la Llovizna, por lo que presentaron una denuncia.

El cerro “La Llovizna” está ubicado en los límites geográficos entre Unión Hidalgo y La Ventosa – Agencia municipal de Juchitán-, en el Istmo de Tehuantepec, donde viven gran variedad de fauna y flora silvestre, y sin importar esta biodiversidad, la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) entregó un permiso a Leonardo Triay Cisneros, para dotar de materia prima, que son rocas y piedras a dicha cementera.

El cierre definitivo lo dictaminó la Procuraduría de Protección Ambiental de Oaxaca “PROPAEO” porque no contaba con permisos ambientales, y usaban explosivos sin autorización en esta reserva comunitaria denunció el defensor comunitario binnizá, Edgar Martín Regalado.

Pero eso no es todo, también mentían, aseguró el activista al denunciar que el sitio sagrado estaba usándose como una mina clandestina para extraer cuarzo, oro y hematita -ingrediente básico para la producción de cemento- y no un simple banco de piedra.

“Leonardo Triay Cisneros no tenía un permiso ambiental vigente, pero lo más grave es porque la Semarnat otorgó un permiso, exigimos saber cuanto recurso recibió por hacerlo, y además que se trata de un delito porque se está haciendo uso de bienes nacionales dañando la biodiversidad que tanto hemos defendido”, expresó.

Dijo que denunciaron ante las autoridad la invasión clandestina, por lo que se abrió una carpeta de investigación de la Fiscalía General de la República (FGR), la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (Profepa) y la Procuraduria (Propaeo), quienes han preferido actuar con cautela, sin embargo, el Ministerio Público determinó que en el caso del Cerro La Llovizna sí hay delito que perseguir.

El defensor señala que recientemente en Ministerio Público determinó que en el caso del Cerro La Llovizna sí hay delito que perseguir de acuerdo con el artículo 149 y 150 de la Ley General de Bienes, sin embargo, no sabe a que figura perseguir.

“Aunque hay artículos de la Ley general de Bienes Nacionales que nos amparan, el Ministerio Público actúa con cautela y dice que no sabe que delito perseguir, pero nosotros no claudicamos, tendremos audiencia ante el juez de control próximamente, para decirle que hagan algo, cada vez está más afectado nuestro cerro, ya pareciera que las leyes los apoyan”, agregó.

Por esta lucha, los defensores han vivido amenazas y criminalización, por lo que esta clausura representa un triunfo, aunque recordaron que la labor de defensa de la tierra, ambiental, acceso a la justicia e información están reconocidos por la legislación nacional e internacional, a través de varios tratados y acuerdos, entre ellos el de Escazú firmado en el 2020, por lo que existe protección y debería ser respetada.

Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress

Fotos cortesía de PROPAEO