Nace en Oaxaca la Unión de Ejidos, comunidades agrarias y colonias agrícolas para defender sus tierras del Corredor Interoceánico

Nace en Oaxaca la Unión de Ejidos, comunidades agrarias y colonias agrícolas para defender sus tierras del Corredor Interoceánico.
Foto: Istmo Press

*Esta nota fue realizada por Istmo Press, parte de la alianza de medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes leer la original.

#SanJuanGuichicovi 09 Dic (#Istmopress) – Reunidos en el salón de Usos Múltiples de la Comisaría Ejidal de San Juan Guichicovi, Oaxaca; comuneros, ejidatarios y campesinos de la zona norte del Istmo de Tehuantepec conformaron la Unión de Ejidos, Comunidades Agrarias y Colonias Agrícolas como resistencia contra el megaproyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).

“Hoy nos estamos constituyendo y construyendo un movimiento en defensa de nuestras tierras, de nuestra biodiversidad, de nuestros recursos naturales y culturales, somos más de veintiocho órganos de representación ejidal y comunal de la Zona Norte del Istmo, y precisamente son nuestras tierras que pertenecieron a nuestros ancestros”, recalcaron durante la presentación de lo que ahora será una fuerza para la defensa de su territorio.

En la zona norte del Istmo de Tehuantepec, el corredor interoceánico pretende abarcar sus territorios, especialmente con la transformación de las vías férreas, pero también con la instalación de un parque industrial, a lo que señalan no hubo consulta a los pueblos y comunidades ni tampoco una Asesoria que les permitiera decidir de forma libre.

Oaxaca, es uno de los estados con más tierras de uso común en el país, cuenta con una superficie de 9536,400 hectáreas, de las cuales 7617,717 hectáreas son de propiedad social, que representan el 78.88 de la superficie total de esta entidad sureña.

Juvencio Chiu Cabrera, comisario de Tolosita y presidente de la Unión de Ejidos y Comunidades narró que desde la época colonial, la independencia, de la reforma, de la revolución, las tierras de uso común han sido seriamente codiciadas y asechadas, por lo que esta vez no es la excepción con la llega de la Cuarta Transformación que encabeza el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador.

Enfatizó que en la actualidad tanto la iniciativa privada, las empresas trasnacionales en vínculos con el gobierno de México, pretenden quitarles sus tierras al campesinado y establecer obras de gran impacto, que ellos llaman “desarrollo”, por lo que no están de acuerdo y defenderán.

De acuerdo con datos históricos, el hoy corredor interoceánico ha tenido varios nombres de acuerdo con el tiempo, antes fue el plan puebla panamá, proyecto multimodal, proyecto mesoamerica, corredor industrial, corredor transismico y con Peña Nieto lo bautizó como zonas económicas especiales.

Los campesinos, ejidatarios y comuneros reconocieron que con la implementación del megaproyecto interoceánico no se ha respetado, observado y cumplimentado los procedimientos cuando se trata de afectación a derechos de los pueblos indígenas que establecen tanto en la Constitución Política federal como en los tratados internacionales de derechos humanos sobre pueblos indígenas.

“Se han violentado el derecho a la consulta y consentimiento libre, previo e informado de los pueblos originarios y tribales, así como existe también una violación del derecho de libre determinación y autonomía de los pueblos indígenas del Istmo de Tehuantepec”, señaló Carlos Leonardo Espinosa, integrante del cuerpo consultivo de esta Unión.

Dijo que como dueños de las tierras por donde se pretende instalarse las obras del Corredor Interoceánico se han unido en un solo bloque, para defenderse del despojo.

Los campesinos, comuneros y ejidarios recalcaron que nadie les consultó para poder instalar esta megaobra en tierras oaxaqueñas.

“En primer lugar nunca se nos consultó y se nos informó a los verdaderos dueños de las tierras, es decir, no hubo consulta ni previa ni informada, ahora nos enteramos que fueron realizadas con su afines llámese presidentes municipales o diputados, para cumplir y aparentar estar apegados a derecho y con el pueblo, consultas realizadas fuera del rango de acción del ferrocarril, consultas e información bajo el agua en lo oscurito como acostumbran los malos políticos, no lo vamos a permitir ni avalar, eso significa que nuestras tierras no se venden, se defienden”, señalaron en asamblea.

A modo de acuerdo, los asistentes precisaron que no van a permitir que las obras se realicen en su territorio, cuando no hay infraestructura social, medica, educativa ni vial que permita un sano desarrollo de las supuestas empresas que intentan colocar.

“No queremos más engaños ni despojos, nosotros lo que queremos es salud, hospitales, educación, escuelas, infraestructura básica, agua potable, energía eléctrica, drenaje, no queremos mentiras ni engaños, eso si que no lo vamos a permitir, ya estamos muy cansados de que lleguen y no cumplan”, advirtieron.

Reiteraron que lo que buscan con la creación de esta Unidad y colectividades es que se resuelvan sus conflictos ancestrales, que se cuide a la vida y al territorio, que se respeten las tierras de uso común y que se implementen recursos para revivir el campo, la autodeterminación y la autogobernación.

Señalaron que durante los años que estuvo Rafael Mollinedo como titular del CIIT en la zona, en ningún momento pudo resolver ni llegar al diálogo , por lo que esperan que el próximo encomendado tenga la capacidad de dialogar, de escuchar y de atender a las comunidades, quienes ya determinaron que por todos los motivos van a defender sus tierras de este megaproyecto.

De acuerdo con datos del gobierno federal, el corredor interoceánico abarca la construcción de un rompeolas en el Puerto de Salina Cruz, la rehabilitación de las vías férreas del Puerto de Salina Cruz a Coatzacoalcos y la construcción de 10 polos de desarrollos o parques industriales donde se espera la llegada de la iniciativa privada internacional.

Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress