¿Qué hacer cuando mi ser querido desaparece a mitad de su camino?: Estrategias de búsqueda para personas migrantes desaparecidas en México
El fenómeno migratorio carece de estadísticas exactas, estas fallas estructurales en un país de origen, tránsito y salida de personas migrantes, facilita la violación de sus derechos humanos y de su integridad.
En promedio, 30 migrantes desaparecen al día durante su trayecto por México hacia los Estados Unidos, según datos del Movimiento Migratorio Mesoamericano.
Muchos de ellas y ellos son buscados por sus familiares en caravanas que recorren a pie el territorio mexicano con la esperanza de encontrarles. Sin embargo, no todas las personas saben cómo actuar o a dónde acudir cuando su familiar desaparece a mitad de su camino.
En medio de estos escenarios surgió el conversatorio “¿Qué hacer en caso de que una persona migrante desaparezca en México?, con el propósito de informar a las familias sobre los mecanismos de búsqueda, las leyes existentes y las organizaciones que trabajan en la localización de migrantes desaparecidos.
Por Aletse Torres Flores en Zona Docs
En 2020, el principal corredor migratorio a nivel mundial fue el de México hacia Estado Unidos, representando el 3.9% de los flujos migratorios del planeta, de acuerdo con el Anuario de Migración y Remesas México 2021.
Desafortunadamente, durante su proceso migratorio los derechos humanos de las personas son vulnerados y violentados. Al momento de ingresar y transitar por México sin documentos, se vuelven “personas invisibles” y vulnerables frente a la violencia social, estructural y del crimen organizado, quienes les secuestran, extorsionan, asesinan o desaparecen.
Aproximadamente, 2 mil personas migrantes se encuentran desaparecidas en territorio mexicano, según las denuncias hechas por sus familiares, así lo reveló en su reporte la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos (FMOPDH).
Sin embargo, esta cifra sólo responde a los casos de los familiares que han puesto denuncias ante las fiscalías; dejando fuera del registro a miles de personas cuya desaparición no ha sido notificada a las autoridades oficialmente.
Debido a las complejidades a las que se enfrentan las familias de las personas migrantes al momento de buscar y denunciar en un país que no es el suyo, nace el conversatorio virtual “¿Qué hacer en caso de la desaparición forzada de una persona migrante en México?”, organizado por la asociación civil Migrante 33.
El conversatorio tuvo como objetivo proporcionar información sobre los mecanismos y las estrategias de búsqueda de personas migrantes dentro del marco jurídico e institucional.
En este espacio participaron May-ek Querales, investigadora del Grupo de Investigaciones en Antropología Social y Forense (GIASF) y Juan Carlos Gutiérrez, abogado y director de I(dh)eas, Litigio estratégico en Derechos Humanos.
¿Qué nos dicen las leyes?
Al momento de ingresar a otro país, los y las migrantes no conocen sus derechos dentro del mismo, pero es obligación de las autoridades brindarles esa información; así lo establece el artículo 69 de la Ley de Migración:
Los migrantes que se encuentren en situación migratoria irregular en el país tendrán derecho a que las autoridades migratorias, al momento de su presentación, les proporcionen información acerca de:
- Sus derechos y garantías de acuerdo con lo establecido en la legislación aplicable y en los tratados y convenios internacionales de los cuales sea parte el Estado mexicano;
- El motivo de su presentación;
III. Los requisitos establecidos para su admisión, sus derechos y obligaciones de acuerdo con lo establecido por la legislación aplicable;
- La notificación inmediata de su presentación por parte de la autoridad migratoria, al consulado del país del cual manifiesta ser nacional, excepto en el caso de que el extranjero pudiera acceder al asilo político o al reconocimiento de la condición de refugiado;
- La posibilidad de regularizar su situación migratoria, en términos de lo dispuesto por los artículos 132, 133 y 134 de esta Ley, y
- La posibilidad de constituir garantía en los términos del artículo 102 de esta Ley.
Igualmente, el Artículo 66, de la misma ley, señala que la situación migratoria de una persona no impedirá el ejercicio de sus derechos y libertades reconocidos en la Constitución, en los tratados y convenios internacionales de los cuales sea parte el Estado mexicano.
De la misma forma, el “Protocolo de actuación ministerial de investigación de delitos cometidos por y en contra de personas migrantes en condiciones de vulnerabilidad y de aquellas sujetas de protección internacional en territorio nacional”, establece elementos que facilitan la investigación y persecución de estos delitos, así como su búsqueda en casos de desaparición en territorio nacional; además de ordenar acciones tendentes a la reparación del daño a las víctimas u ofendidos (as) y lograr el pleno acceso a la justicia federal.
¿Quién(es) buscan en México?
Las familias de personas migrantes desaparecidas tienen derecho a acercarse a las instituciones gubernamentales y no gubernamentales, para solicitar ayuda en sus procesos de búsqueda.
Juan Carlos Gutiérrez, señaló que la Comisión Nacional de Búsqueda puede ayudar a estas familias a fortalecer sus búsquedas, investigaciones y lograr su localización, puesto que, es su derecho y el de su familiar, según lo dicta la Ley de Migración.
Asimismo, pueden acudir a la Comisión Local de Búsqueda del estado en donde fue visto por última vez su ser querido.
Otra opción es la Unidad de investigación de delitos para personas migrantes (UIDPM), la cual está obligada a realizar la búsqueda de personas migrantes en condición de vulnerabilidad o tránsito.
De igual forma, cuenta con el Mecanismo de Apoyo Exterior Mexicano de Búsqueda e Investigación (MAEMBI), este ofrece ayuda a las víctimas migrantes y/o sus familiares para que accedan -desde el país en donde se encuentren- a las instituciones del Estado mexicano encargadas de investigar los delitos del orden federal que se comenten en su contra.
En caso de estar en México, pueden acudir a la oficina ubicada en Ciudad de México, en la Calle López No. 12, en el primer piso, en la Colonia Centro. Si no se encuentran en el país, pueden denunciar vía correo al código postal 06050; al teléfono 01800 00 85 400; al 088 de la Policía Federal; o por correo electrónico a la unidadmigrantes@pgr.gob.mx
En el caso de las personas migrantes que desaparecen al momento de cruzar la frontera norte, sus familias pueden acudir al Centro Colibrí para los Derechos Humanos, quienes trabajan para crear un proceso confidencial, humano y efectivo que les permita encontrar respuestas sobre el paradero de su ser querido.
May-ek Querales, investigadora del Grupo de Investigaciones en Antropología Social y Forense (GIASF), explica que las familias pueden ponerse en contacto con los colectivos de familias buscadoras pertenecientes al estado donde desapareció la persona o, en su defecto llamar al 911 para reportar la desaparición.
Es importante advertir que, para presentar una denuncia por desaparición en cualquiera de las dependencias oficiales, no importa la edad, nacionalidad y si se está en un país distinto a México.
Estrategias para la búsqueda
Pese a que cada día son desaparecidas 30 personas migrantes, no hay bases unificadas de registro que dimensionen oficialmente esta realidad y, mucho menos, existe una coordinación interinstitucional efectiva que atienda la problemática.
Las y los familiares han manifestado que los estados no agotan todos los medios de búsqueda efectiva y se encuentran con diversos obstáculos en los procesos de investigación.
Por ello, la Guía “Caminos para la Búsqueda en Vida”, compuesta por cinco secciones: 1) Ley de Migración, 2) Proceso de Búsqueda; 3) Contigo Sin Fronteras, 4) Guía de Búsqueda para personas migrantes desaparecidas, y 5) Guía de Informativa para familiares de migrantes desaparecidos, es un documento que podría ayudarles en su camino.
Además, las y los expertos recomiendan a las familias realizar un análisis del contexto donde desapareció su ser querido, para reconstruir, en la medida de lo posible, lo que pudo haberle sucedido:
“Estas herramientas luego suenan como muy difíciles, pero solo se trata de colocar en el centro a la víctima, preguntarse: ¿quién es la persona desaparecida? Recolectando así, la mayor cantidad de información de familias y cercanos” comentó Querales.
Este elemento es de suma importancia, puesto que, cada región, municipio y estado son distintos, al realizar este análisis de contexto, explican las y los especialistas, “podremos localizar patrones de criminalidad; nos permite hacernos preguntas sobre la desaparición y qué factores pudieron vulnerar aún más la situación de la persona migrante (edad, género, nacionalidad, entre otras)”.
Por su parte, Gutiérrez señala que, tras interponer la denuncia, es primordial incluir las características físicas básicas de la persona, sus últimos contactos y el lugar donde fue visto por última vez. Incluso, podrían informar a las autoridades cuál era su rutina, para acudir a los lugares que frecuentaba.
En caso de realizar su búsqueda por cuenta propia en el territorio mexicano, pueden comenzar visitando albergues, hospitales, centros carcelarios, estaciones de autobuses, puntos donde transite el ferrocarril, aeropuertos y hasta en campo.
Finalmente, resulta fundamental tener en cuenta los siguientes consejos que, podrían ayudar a las madres, padres, hijos e hijas que siguen buscando a su amor desaparecido:
- No se culpe por la desaparición de su ser querido.
- Necesita cuidar sus necesidades físicas y emocionales, para poder emprender la búsqueda, no debe ponerse en segundo plano.
- Crea un espacio en tu día para enfocarte en ti, lejos de la presión de la búsqueda.
- Construye mecanismos para la gestión del estrés.
- No permitas que las opiniones de los demás invaliden tu sentir.
- No te sientas culpable o avergonzado si no tienes las fuerzas para salir de buscar de inmediato.
- Puedes solicitar una visa humanitaria para poder realizar la búsqueda en el país.
- Acompañarse entre las familias buscadoras.
Es necesario comprender desde la empatía lo que significa para una persona que algún ser querido sea desaparecido durante su proceso migratorio, pues junto con ellas y ellos desaparece un reencuentro, un sueño o un abrazo.
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