Más hospitalizaciones por aborto entre niñas de 10 a 14 años

Angelica Jocelyn Soto

La criminalización del aborto y la falta de servicios seguros para la interrupción del embarazo en las entidades federativas de México propició que la tasa de hospitalizaciones maternas por aborto haya aumentado en los últimos 10 años, sobre todo entre las adolescentes de 10 a 14 años de edad, informó Ipas-México.

Al participar en el seminario “Aportaciones de la sociedad civil al proceso de despenalización del aborto en la Ciudad de México”, Raffaela Schiavon, directora de Ipas-México, dijo que el aborto inseguro sigue siendo una de las principales causas de hospitalizaciones y muerte materna (MM) en el país.

La especialista señaló que, de acuerdo con las cifras del Subsistema Automatizado de Egresos Hospitalarios (SAEH), de la Secretaría de Salud federal, la hospitalización por maternidad de 2000 a 2012 fue de 12 millones 623 mil 626 casos, y de éstos, un millón 339 mil 330 fueron por aborto, lo que es igual a que una de cada 10 hospitalizaciones se debió a interrupciones del embarazo.

Raffaela Schiavon recordó que la causa materna representa uno de cada dos egresos hospitalarios de mujeres; de ellos, 5 por ciento son por abortos, y explicó que la clasificación por tipo de aborto revela que más del 50 por ciento de las hospitalizaciones estuvieron relacionadas con “abortos no clasificados”, es decir, aquellos que podrían ser inducidos de manera insegura.

MUERTE MATERNA POR ABORTO

De acuerdo con lo que explicó la especialista, en los últimos 20 años se presentaron más de 29 mil muertes maternas en México; de ellas, 2 mil 109 fueron por aborto, 270 correspondieron a adolescentes y 11 a niñas de 10 a 14 años de edad.

La titular de Ipas-México advirtió que el aborto representa una de cada MM, y que los decesos por aborto ocupan el cuarto lugar de las causas de muerte en las adolescentes.

La también activista señaló que, como en el caso de los egresos hospitalarios, el 52 por ciento de las MM se deben a abortos no especificados, que son probablemente inseguros, y agregó que el 67 por ciento de las mujeres que murieron por interrumpir un embarazo no tenían derechohabiencia ni estaban inscritas al Seguro Popular.

Ipas-México sumó a estos datos el indicador de “letalidad materna”, que se refiere al número de MM por aborto por cada 100 mil egresos hospitalarios. Esta cifra, explicó Schiavon, refleja las barreras que enfrentan las mujeres para practicarse un aborto seguro por ausencia de servicios de salud especializados, o por “estigma y discriminación”.

En concreto, la “letalidad” por aborto en México es de 45 muertes por cada 100 mil hospitalizaciones por aborto a nivel nacional, y de 115 en Guerrero (estado que registra menos egresos hospitalarios y donde las mujeres acceden a métodos inseguros para interrumpir la gestación). “Donde más se hospitalizan las mujeres, menos se mueren”, observó Schiavon.

La también secretaria técnica del Comité Promotor por una Maternidad Segura concluyó que el aborto inseguro es un problema de salud pública y de derechos que implica daños a la salud, demanda mayor atención hospitalaria, y genera altos costos al sistema de salud pública y a los bolsillos de las mujeres.

La criminalización del aborto, detalló, conlleva a la criminalización, la inequidad social y el estigma de las mujeres que por una variedad de razones buscan acceder a él.

La experta recordó que los embarazos no deseados en muchos casos son consecuencia de la necesidad insatisfecha de anticonceptivos, fallas en alguno de estos métodos, o ruptura con la pareja o violencia sexual.

Enfatizó que las mujeres que están siendo procesadas y encarceladas por abortar son en su mayoría población vulnerable, indígena, de escasos recursos y jóvenes.

Raffaela Schiavon informó que los grupos civiles contribuyen de muchas maneras a prevenir la MM por aborto, y que los primeros esfuerzos derivaron en que el sistema de salud generara mejores formas de registro de egresos hospitalarios, muertes maternas e interrupciones de embarazos, pero que ahora es necesario desarrollar estadísticas más específicas y servicios de salud especializados.