El problema no es “la Bestia”

Miles de migrantes continúan buscando la manera de atravesar México. Foto: Vladimir Pérez

Miles de migrantes continúan buscando la manera de atravesar México. Foto: Vladimir Pérez

Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

“La Bestia”, el tren de carga que recorre México y en cuyo techo viajan, clandestinamente, cientos de migrantes indocumentados diariamente que quieren llegar a Estados Unidos, no es el problema de la migración. Así lo dijo el sacerdote Pedro Pantoja, del albergue para migrantes de Saltillo, y la hermana scalabriniana Leticia Gutiérrez, directora de la misión scalabriniana para migrantes y refugiados, durante el foro “Elementos para la reforma a la ley de protección y atención a migrantes y sus familias del estado de Tlaxcala, realizado el viernes 29 de agosto en el Congreso de Tlaxcala.

Al hablar del tema migratorio, los defensores dieron un panorama general pero también se enfocaron específicamente en la situación regional y en los esfuerzos del colectivo “Por una migración sin fronteras”, que lleva meses trabajando conjuntamente con varios diputados para reformar la actual ley Estatal de Migración. Este es el primer esfuerzo donde han colaborado organizaciones de la sociedad civil, familias de migrantes y legisladores, buscando que la ley sea adecuada a la realidad regional.

La crisis nacional

La hermana Leticia dijo que el Estado Mexicano no ha aceptado la responsabilidad que tiene en la crisis humanitaria que viven los transmigrantes, y que la decisión de subir la velocidad de “La Bestia” no solucionará la migración de menores no acompañados ni los crímenes y violaciones sistemáticas a los derechos humanos que sufren los migrantes en el país, tanto de grupos del crimen organizado como de autoridades coludidas.

El Padre Pantoja mencionó el tema de los niños que viajan solos, que son, dijo, la tercera generación de migrantes. La primera, de 1998 a 2009, fue de hombres –adolescentes y adultos-, después de 2010 a 2014 fueron las mujeres, “algo tocó fondo, ya no regresaron ni el esposo ni el hijo”. Y la tercera y actual es la de niñas y niños, todos siendo expulsados por sus propios países, orillados a situaciones de violencia y pobreza.

En el foro estuvo presente personal de la Segob, explicando el programa migratorio de la Secretaría. De acuerdo a la representante del gobierno federal, esta es la primera vez que el Estado Mexicano involucra y toma en cuenta aspectos de la migración como los transmigrantes, y no toma en cuenta sólo a los mexicanos en el exterior, aunque sí ha tenido trabajo con las comunidades de mexicanos en otros países -que son muy vastas pues alrededor del 5 por ciento de los nacidos en el país residen en el extranjero.

En Tlaxcala

La iniciativa del colectivo de hacer un trabajo junto con los diputados es un parteaguas a nivel nacional, pues sería una iniciativa de ley conjunta con organizaciones de activistas que trabajan directamente tanto como con comunidades de origen de expulsión de migrantes como con migrantes extranjeros en tránsito y en retorno.

El foro fue la presentación de jornadas de diálogos y trabajo que llevan varios meses en Tlaxcala, en las que han participado también colectivos poblanos que trabajan el tema migratorio como Iniciativa Ciudadana, y agentes del gobierno como diputados y personal de la Secretaría de Gobernación federal (Segob).

Pese a que los ponentes, defensores de migrantes y activistas, aplaudieron la iniciativa de la reforma de la ley estatal, mencionaron la importancia de tomar en cuenta verdaderamente todo el contexto tanto local como nacional para crear una ley que sea funcional e incluyente con las 4 etapas de la migración, según las palabras del padre Pantoja: expulsión, persecución, exterminio y holocausto.

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