A Maribel, una atleta ciega, un perro la atacó y el estado la ha abandonado

Mely Arellano

@melyarel

Como todos los días, el 30 de abril Maribel Peña Cervantes y su esposo Giovanni Enrique Martínez Velázquez salieron cerca de las 12 horas de su casa, en el fraccionamiento Los Héroes, para recoger a su hija de 5 años del kínder.

MaribelPeña

Maribel caminaba atrás de Giovanni, sujetando su hombro, en fila india, confiando en sus pasos y el ágil manejo del bastón guía que, en el mundo de oscuridad en el que viven, es único faro. Ambos son ciegos.

Maribel y Giovanni caminaron tres calles hasta llegar a una rotonda, cruzaron la rotonda, avanzaron por una calle donde está un restaurante, luego pasaron por un parque en forma de triángulo y llegaron a una calle donde hay una panadería, una pollería y una escuela primaria. Ahí su camino, ese que recorren a diario por considerar el de menos obstáculos, se interrumpió.

Giovanni escuchó un gruñido frente a él, apenas alcanzó a retroceder dos pasos cuando el perro –un pit bull, lo sabría después- lo esquivó y se abalanzó sobre el pecho derecho de Maribel, segundos después el animal soltó para emprender un segundo ataque hacia su mano izquierda clavándole la mordida sin hacer caso de las órdenes de su dueño, Charbel Serrano Castillo, quien le gritaba que se detuviera pero éste no le hacía caso, estaba fuera de su control.

Cuando el perro al fin dejó a la mujer, Charbel Serrano trató de huir pero la gente, atraída por los gritos de Maribel y consternada por la abundante sangre que comenzó a brotar de las heridas, no se lo permitió, aun cuando trató de intimidarla con su perro. Es más, la amenaza fue clara: o se hacía responsable o lo iban a matar.

Continuar leyendo en LadoB

Sin comentarios aún.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Comparta su opinión. Su correo no será público y será protegido deacuerdo a nuestras políticas de privacidad.