Sobrevivir en la tormenta
Los periodistas, los llamados Perros del Mal cohabitan agazapados en su pelaje,- duro, tumefacto, compacto, desde los días de la glaciación en la tundra, en la montaña o en el valle, qué más da- en el temple de sus dientes y sus lenguas, acostumbrados como están a la espera y a la lucha, que es persistencia y resistencia, lo mismo en la paz como en la guerra. Ovillados en su existencia citadina, con sus relieves y sus matices grises, todavía más en estos días de violencia y barbarie con sus muertes de fusiles y pistolas, Los Perros del Mal no poseen más que sus universos personales traducidos en protestas, reclamos, solidaridades e inusitadas […]