En 5 horas se perdió la esperanza de la «cuarta transformación»en Chiapas
A Chiapas la cuarta transformación le duró cinco horas. La primera transformación, la independencia de México, esta entidad del sur ni siquiera la vivió, era entonces parte de la capitanía de Guatemala. La segunda, las Leyes de Reforma, no se concretaron, demasiado lejos del centro. La revolución mexicana, la tercera transformación, se vivió distinta en Chiapas. Ahora, la esperanza de que la cuarta transformación fuera posible se fue en unas horas.
En las redes sociales apenas se festejaba que el Senado de la República había votado en contra de la licencia de Manuel Velasco Coello con lo que se le impedía que llegara a ser gobernador sustituto cuando ya los medios de comunicación daban a conocer que se cabildeaba la reposición del proceso de votación. No hubo error en el procedimiento lo que sucedía es que la votación no les salió como el acuerdo político pactado.
Cinco horas de diferencia hubo entre una votación y otra. Cinco horas entre el cambio de decisión de las y los senadores, quienes primero le entregaron a Chiapas la esperanza de que un cambio era posible y después se la quitaron.
En el primer día de sesiones, los senadores abrieron el telón y dejaron ver que lo que sucede tanto en la Cámara de Diputados y Senadores es una función de títeres.
Sin rubor el coordinador de Morena, Ricardo Monreal se subió a tribuna para decir que la licencia de Manuel Velasco era algo pactado en la Junta de Coordinación Política, pero que algunos coordinadores no bajaron la información a las y los senadores de su bancada y por eso el resultado de la primera votación. En esa misma sesión dijo que las y los legisladores de Morena votaban en libertad, que no había línea, cuando momentos antes había dado a notar lo contrario. No fue la única incongruencia en esa sesión, tampoco la única de un senador de Morena.
“Estamos empezando una cuarta transformación, no la empiecen de esta manera, no terminen abollándolo de esta manera” les dijo hasta de forma burlona el senador Madero del PAN a las y los senadores de Morena. No le hicieron caso.
El senador por el estado de Baja California, Víctor Manuel Castro Cosio también quiso apelar a la dignidad de sus compañeros de la bancada de Morena. No sabía que no se puede apelar algo que no existe. Mientras él hablaba y le decía a Manuel Velasco que le urgía regresar a Chiapas para seguirlo empobreciendo; desde su curul, el coordinador de Morena –el que había dicho que no había línea para los senadores de su partido- le pedía al legislador norteño que regresara a su asiento.
Manuel Velasco durante todas las horas que duró la discusión se mantuvo callado, con la mirada pérdida, como viendo a un punto fijo, pero realmente no veía nada. Su cara de enojado, de molesto, que no se le quitó aún en la noche cuando fue recibido de manera improvisada en Palacio de Gobierno en la capital de Chiapas ya como gobernador sustituto. Algunos de sus compañeros senadores le dijeron de todo: “sin vergüenza”, “cínico”, responsable del empobrecimiento en Chiapas. Todo el tiempo permaneció inmóvil, sin abrir la boca, sin un gesto evidente. Cuando inició la discusión tomó la palabra unos minutos para solo decir que como senador estaba en su derecho de pedir licencia.
Una veintena de senadores hablaron durante casi cuatro horas sobre la licencia de Manuel Velasco. Algunos a favor, otros en contra, pero todos dejaron claro que ya existía un acuerdo para votar a favor de la licencia, que ya era algo pactado en la Junta de Coordinación Política. Lo que se discutía era el proceso, de que fuera en la misma sesión que se votara el mismo tema lo cual por Ley no se podía.
En la primera votación el argumento de la senadora Xóchilt Gálvez del PAN y Blanca Estela Piña Gudiño de Morena es que Manuel Velasco Coello se estaba burlando de la ciudadanía al crear “un traje a la medida” para poder pedir licencia como gobernador, tomar protesta como senador, luego pedir licencia y regresar como gobernador sustituto. Un hecho sin precedentes. Los argumentos eran de fondo, pero en la segunda votación fueron pocos las y los legisladores quienes abordaron el tema a profundidad.
Mientras todo esto sucedía en el Senado, en las redes sociales el nombre Manuel Velasco era lo más tuiteado. La mayoría de las manifestaciones eran en contra de que se otorgara la licencia. Aunque el error fue desde que se le dio la oportunidad de ser candidato a senador.
Cualquiera podía pensar que el abrumador respaldo de la mayoría de legisladores de la fracción de Morena a Manuel Velasco era producto de la alianza que de por sí tienen el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador con el ahora gobernador sustituto. Pero, “el favor de la licencia” fue cobrado el mismo día en la Cámara de Diputados. El Partido Verde le dio cinco legisladores a Morena con lo que ahora son mayoría en la llamada cámara baja.
Uno de los diputados que le entregó el Verde a Morena es Humberto Pedrero, quien fuera secretario de hacienda del gobierno de Manuel Velasco, el mismo que se hizo pasar por indígena para poder llegar a ocupar un escaño en el Congreso. Supongo que a esas alturas a Morena poco le importaba la “calidad” de la carta que le daban a cambio. Si ya de por sí se habían destapado como cínicos, pues, ese mismo día nos dijeron que no tenían remedio.
El PRI tampoco es que se haya ido con las manos vacías. Todo parece indicar que una de los temas que se puso a negociación fue la toma de protesta como senador del también chiapaneco, Noé Castañón, quien, “curiosamente” este mismo martes ya apareció al igual que sus hijos. El coordinador de la bancada del PRI dijo que esperaran que se resuelva su problema legal, que es altamente probable que sea en próximos días, para que llegue a tomar protesta.
En un solo día a Chiapas le quitaron la esperanza de la cuarta transformación. En un solo día las y los senadores –la mayoría de Morena- dejaron en claro que para ellos el sur sigue siendo sacrificable, un latifundio que les queda lejos y que es mejor dejarlo en manos del hacendado. Si hoy las y los chiapanecos tuvieran que votar de nuevo supieran que el “6 de 6” es una trampa y que en cualquier democracia deben de existir los contrapesos.
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[…] En 5 horas se perdió la esperanza de la “cuarta transformación”en Chiapas (Chiapas Paralelo, 5 de septiembre de 2018) […]